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Qué es el ojo

El ojo es un órgano ultra eficiente, pero también complejo y frágil. La visión es de los cinco sentidos el más solicitado. Más o menos el 70% de la información que tenemos sobre nuestro entorno nos lo proporciona la visión. Su primer vector son los ojos, que captan la luz de nuestro entorno para convertirla en señales eléctricas que se trasmiten a nuestro cerebro para que las pueda interpretar, creando las imágenes.

Directamente conectado al cerebro, el ojo humano es un globo de 2,2 a 2,5 centímetros de diámetro que pesa entre 7 y 8 gramos. Es móvil gracias a sus 6 músculos extrínsecos o extraoculares, insertados sobre la parte más externa del ojo, la esclera. Estos músculos se contraen y relajan en coordinación con los del ojo opuesto.

El ojo es una estructura muy compleja, consta de una veintena de órganos vivos, todos esenciales para una correcta visión. Para entenderlo, vamos a describir de forma sencilla cada una de estas partes e intentar entender qué papel juega cada una de ellas en el proceso de la visión.

partes del ojo humano

Partes del ojo humano

El ojo es una esfera llena de líquido y compuesta de tres capas, o túnicas como «muñecas rusas».

    La esclera

  • 1. La primera túnica es la capa más externa del ojo: la esclera. Es una envoltura blanca fibrosa y resistente que protege y da su forma al ojo, lo que llamamos en lenguaje común el “blanco del ojo”. La esclera está recubierta por la conjuntiva, mucosa transparente que recubre la parte externa del ojo y la superficie interna de los párpados. La conjuntiva tiene como papel principal nutrir y lubricar el ojo.

    Delante del ojo, la esclerótica da paso a una «ventana» transparente: la córnea. La cornea es transparente y permite el paso de la luz para obtener visión. La córnea aporta dos tercios de la potencia dióptrica total del ojo y filtra parte de los rayos UV. La córnea se nutre de las lágrimas que se renuevan con el parpadeo de los párpados.

  • Úvea: iris, coroides y cuerpo ciliar

  • 2. La segunda túnica es la túnica vascular o úvea compuesta por el iris, la coroides y el cuerpo ciliar.

    • La coroides es una envoltura delgada y muy vascularizada. Opaca, permite la oscuridad total dentro del ojo como en un cuarto oscuro de un laboratorio fotográfico. Es la coroides quien aporta el oxígeno y los nutrientes necesarios al ojo.
    • En la parte frontal del ojo, la coroides termina con el iris, reconocible por su color: azul, verde, marrón, dependiendo del grado de producción de la melanina. En su centro, el iris está perforado para transmitir la luz: este orificio es la pupila. El iris está situado en el humor acuoso, entre la córnea y el cristalino, separando la cámara anterior del ojo de la cámara posterior. Esta inervado por fibras nerviosas que activan y regulan la contracción y la dilatación de la pupila.
    • Más adentro, la coroides se extiende para formar el cuerpo ciliar alrededor del cristalino. El cuerpo ciliar es como un anillo de tejido muscular que produce el humor acuoso. Los músculos cilíndricos del cuerpo ciliar participan también en la modificación del cristalino que permite el proceso de acomodación, para ver con claridad.

    Las partes del ojo humano

  • La retina

  • 3. La última capa o túnica es nerviosa, es la retina. La retina es una membrana delgada y transparente que cubre la parte posterior del ojo. Está destinada a recibir la información luminosa que proporciona la visión. Se caracteriza por una parte central con la mácula, fóvea y foveola que permiten una visión precisa, y una parte periférica que permite la visión lateral, la situación en el espacio.
    La retina está formada por células fotosensibles y fotorreceptores (los conos y los bastones) que son los que mediante un proceso fotoquímico originan un conjunto de impulsos nerviosos que salen a través del nervio óptico y llegan a la parte del cerebro donde se produce la visión.

Cristalino, humor acuoso y humor vítreo

Estas tres capas que acabamos de describir encierran tres elementos transparentes, indispensables a la visión. Conforman el sistema óptico que garantiza que llegue la luz a la retina. Se trata del cristalino, del humor acuoso y del humor vítreo.

  1. El cristalino es la lente natural del ojo. Por sus propiedades, flexibilidad, transparencia y su forma biconvexa, permite enfocar la luz en la retina, proporciona un tercio de la potencia dióptrica total del ojo, permite la acomodación para ver claramente, y absorbe algunos de los rayos UV. Normalmente transparente, el cristalino, en presencia de cataratas se vuelve opaco.
  2. El humor acuoso es un líquido transparente que llena la parte frontal del ojo entre la córnea y el cristalino. Transporta elementos nutritivos para estos órganos. El humor acuoso se renueva constantemente mediante un mecanismo de producción y eliminación, regulando así la presión ocular.
  3. La mayor parte del volumen del globo ocular está lleno de un elemento viscoso que se licua con la edad: el cuerpo vítreo. Sus funciones principales son apoyar la rigidez y elasticidad del globo ocular, y mantener la retina contra la pared del globo ocular

En la parte posterior del ojo, ligeramente descentrado con respecto al eje central del ojo, el nervio óptico está unido a la retina. Este cordón cilíndrico de 5 cm de largo transmite información visual al cerebro en forma de señales eléctricas. Esta zona circular donde se une el nervio óptico y la retina se llama la papila óptica, no tiene foto fotorreceptores, es ciega: es la parte de la retina, conocida como «punto ciego».

¿Cómo funciona el sistema visual?

Para entender cómo funciona el sistema visual lo podemos comparar a una cámara de fotos.

Primero la luz penetra en el ojo por la córnea, que sería como el objetivo de la cámara. Penetra a través de la pupila que juega el papel de diafragma regulando su tamaño en función de las condiciones exteriores para que entre más o menos luz en el ojo.

La luz atraviesa el cristalino que juega un doble papel, primero acomodar en función de la distancia del objeto, como un zoom, y luego converger la luz en la retina, concretamente en la fóvea, donde la imagen se va a “imprimir” al revés.

Por fin, el papel principal de la retina es de transformar esta imagen, la luz, en señales eléctricas, que se transmiten a su vez al cerebro para que pueda reconstruir la imagen y así interpretar lo que nos rodea.