¿Qué es el nistagmo?

El nistagmo es un movimiento de temblor, involuntario, incontrolable y repetitivo del globo ocular, es decir, es un trastorno en la coordinación de los músculos del ojo.

El movimiento de los ojos puede ser vertical, horizontal, rotatorio, o una combinación de todos ellos. Los casos en que es precoz su aparición no generan sensación visual de movimiento de las cosas , pero en los casos adquiridos en edad adulta si, por lo que los pacientes están muy incómodos.

En numerosas ocasiones pueden asociar alteraciones a nivel del sistema nervioso central y requieren la colaboración de otro tipo de especialistas como neurólogos y neurocirujanos, por lo que tras la evaluación oftalmológica puede ser preciso una segunda consulta a estos en caso que así esté indicado.

Produce una disminucion de la visión habitualmente y en muchas ocasiones posiciones anomalas de la cabeza para intentar compensarlo, llamada torticolis.

Se asocia a veces estrabismo al problema de temblor ocular. Casi siempre necesitan alguna corrección con gafas o lentillas, ya que los defectos de refracción son mas frecuentes en estos pacientes que en la poblacion general.

Nistagmo - Tipos y tratamientos - Novovisión

¿Cuándo se opera el nistagmo?

La cirugía se realiza a los pacientes que su nistagmo se detiene, o disminuye mucho en alguna posición de la mirada y esto hace que la persona que lo padece vaya siempre con la cabeza inclinada, siempre en la misma posición en la que pueda mirar al frente con el menor movimiento en sus ojos.

Tambien se puede intentar disminuir el temblor en aquellos casos que no mejora en ninguna posición de la mirada o en niños muy pequeños, en torno al año de edad con el propósito de que su visión sea algo mejor en edad adulta.

Si existe estrabismo asociado se puede tratar generalmente de manera independiente o asociada al nistamo.

¿En qué consiste la intervención de nistagmo?

Hay muchas técnicas quirúrgicas que tratan de mejorar diferentes tipos de nistagmo, desde una simple inyección de botox hasta una cirugía sobre los musculos extraoculares.

La toxina botulínica paraliza temporalmente los musculos del ojo en donde se inyecta y nos permite evaluar de manera temporal si esa acción genera alguna mejoría en la posición de la cabeza o en la capacidad visual de los pacientes. Generalmente la cirugía de nistagmo tiene como objetivo recolocar los músculos que mueven los ojos para que la posición de la cabeza en la que no se mueven los ojos sea normal. Tambien se pretende reducir la amplitud del temblor para que la visión mejore, como hemos explicado en niños más pequeños.

Normalmente esta operación no termina de eliminar el nistagmo de forma definitiva pero si lo mejora mucho. Muchos de estos pacientes se quitan además la necesidad de gafas mediante una intervención convencional de láser o implantación de lente intraocular. Ya que como hemos explicado , en muchas ocasiones tienen defectos de graduación. Esa intervención de cirugía refractiva se suele realizar cuando los pacientes son más mayores, generalmente no antes de los 18 años. Aunque tras la cirugía el nistagmo no desaparece del todo, sí mejora la visión y, por tanto, corrige la posición anormal de la cabeza y esto se logra de forma inmediata.

La recuperación tras una inyección de toxina es muy rápida, generalmente al día siguiente pueden estar haciendo su vida normal.

En caso de cirugía sobre los musculos la recuperación requiere unas dos semanas aproximadamente y en torno a seis semanas para normalizar por completo las actividades cotidianas.