Todos sabemos que seguir una dieta equilibrada resulta imprescindible para el buen mantenimiento de la salud pero pocas veces nos preguntamos por los beneficios concretos que cada alimento aporta a nuestro organismo.

En este sentido la publicación internacional Ophthalmic and Physiological Optics ha difundido un estudio que demuestra la relación de la dieta con trastornos visuales como la catarata y la DMAE (Degeneración Macular Asociada a la Edad). Dicha investigación hace hincapié en la importancia de los antioxidantes, en especial luteína y zeaxantina.La luteína se encuentra en verduras y hortalizas de color verde oscuro como coles de bruselas, espinacas, lechuga así como en la calabaza, tomate, pimiento, maíz y en frutas como arándanos, ciruelas, peras, manzanas, frambuesas, naranjas, fresas, kiwi y uvas rojas.

Y la zeaxantina en las naranjas, el melón, el mango y la papaya.

Otros antioxidantes que cumplen un papel importante a la hora de prevenir estas enfermedades oculares son las vitaminas C y E.

La vitamina C está presente en el perejil coles de bruselas, brócoli, pimientos, tomate, melón, repollo, verduras de hoja verde y por excelencia, en cítricos (naranjas, limones, pomelos).

La vitamina E en aceites vegetales, verduras y hortalizas de color verde, espárragos, lechuga, nueces, tomate, germen de trigo, maíz, yema de huevo, salmón, atún, langosta, aguacate, manzana ciruela, melón y plátano.

Respecto al zinc, es un nutriente esencial para el buen funcionamiento de la retina y lo encontramos en el apio, espárragos, higos, berenjena, sésamo, germen de trigo, legumbres, frutos secos, cangrejo, sardinas, ostras, carne magra, huevos, queso y pescado.

La vitamina A contribuye a reducir la presión intracelular y su carencia puede producir disminución en la agudeza visual, sequedad de la conjuntiva, inflamación de los párpados y ulceraciones en la córnea.

Podemos tomarla en forma de provitamina A (beta carotenos) encontrándose en la zanahoria, espinacas, tomate, yema de huevo, hígado, verduras y lácteos.

Asimismo la vitamina B 12 mejora el estado de la mucosa conjuntival, previene la fotofobia y está presente en el hígado, vaca, cerdo, pan integral, lácteos, cereales integrales, frutos secos, coles, espinacas, rábano, lechuga y levadura de cerveza. Finalmente, se ha demostrado que poblaciones con dietas altas en aceites Omega 3 tienen muy baja incidencia de glaucoma, presente en el salmón, caballa, atún, bacalao y sardinas.

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